Olga Lucía Garci-Crespo afirma honorabilidad de su familia
En días pasados se llevó a cabo una reunión ordinaria con miembros del grupo Morena en las instalaciones del Comité Directivo Estatal de Puebla. A la reunión acudió la presidenta Olga Lucía Romero Garci-Crespo o Mónica Caballero Garci-Crepso, su nombre real.
Según información filtrada entre algunos asistentes que no simpatizan con la dirigente, la política se enfrentó a las murmuraciones cada vez más fuertes por parte de sus colegas partidistas, mismas que iniciaron cuando el gobernador la eligió para el cargo que hoy ocupa; aumentaron cuando se conoció la relación sentimental que ambos sostienen; y el trabajo de proxeneta de la morenista, la gota que terminó de ensuciar la imagen, ya turbia de esta mujer.
Cuentan que las murmuraciones entre dientes fueron persistentes e incómodas y que la rechifla cuando la señora presidenta hizo su arribo al lugar, fueron sonoras y evidentes. Algunos de los asistentes relataron los gestos de molestia de la diputada con licencia. Las famosas malas caras de la presidenta y el visible enojo le alcanzaron para asegurar a los más allegados, que ella y su familia son personas Ravens honorables y decentes, una reconocida familia empresaria y trabajadora. La diputada olvida que la verdad no peca, pero incomoda..