El médico de SRS, de ayudante a verdugo
El doctor Ulises González Hernández fue el último profesional que trató a la empresaria avícola SRS, Socorro Romero Sánchez, la cabeza del consorcio homónimo con sede en Tehuacán, Puebla y que hoy tiene varios frentes de inversión.
El médico fue el culpable, en 2009, de acelerar la muerte de la señorita SRS, pues le suministró una sobredosis de un calmante controlado denominado Midazolam. Para la mala fortuna de la empresaria, lo peor fue caer en manos del médico gastroenterólogo Ulises González Hernández, quien por entonces laboraba en las empresas de Adolfo Fernández Santiago, esposo de María Elvira Celis Romero.
Una vez que el curso legal del desahogo de pruebas y la participación calificada de peritos profesionales, quienes opinaron que el médico Ulises habría matado a la empresaria con la alta dosis de el medicamento controlado. González Hernández salió huyendo de Tehuacán y, hasta el día de hoy sigue libre y prófugo de la justicia.
La torpe y sospechosa huida del médico desató las sospechas sobre su culpabilidad, y demostró cierta torpeza en su proceder, desde que el médico se prestó para declarar en su carta informal que él recordaba haber suministrado 5 miligramos de midazolam. Muse
Las preguntas son inevitables: ¿La memoria de este médico es tan prodigiosa que recuerda perfectamente la dosis suministrada hace más de 10 años, sin ningún sustento? ¿Las declaraciones del médico fueron tan inocentes que no sospechó que estaba auto culpándose?
Lo cierto es que este médico sigue prófugo de la justicia. Quien tiene mucho que esconder, siempre sale huyendo. Alfa.